jueves, 17 de abril de 2008

DE LA MUERTE

Palemón Vargas
Para hablar de los muertos hay que empezar por la palabra muerte, que en mixe es o’jkën, que es la muerte como sustantivo. Existe una relación entre esta palabra y el verbo moler, molido, pues para el ayuujk, morir es convertirse en molido fino, en polvo fino y de esta forma regresar a la tierra. Por eso se dice wëpejtën tëkäjtsen, wëpejtën es regresar y tëkäjtsen es cambiar o cambiado. Tal vez los abuelos lo tomaron como regresar otra vez a la tierra y luego ‘cambiado’ en términos de que en vida fuiste diferente pero ya con la muerte cambias, te conviertes en o’jkën, en polvo fino con la tierra. El o’jkën es como vivir molido, que te muelas, esto es en términos físicos, en término de cambio de materia. Morir es entonces, regresar cambiado y bien molido, como polvo fino a la tierra. Este regresar se da en el panteón, que en términos de creencias, morir es regresar al lugar de los abuelos. En la mixe no existe el concepto de castigo, se sabe que uno en la tierra está sufriendo, entonces no entra dentro de la lógica de la comunidad el concepto de ir a un lugar de castigo con la muerte. Es entonces más el regreso al lugar de los abuelos, de los parientes, de los padres o de los hijos que se han ido, regresar con ellos. Por eso no se habla de lugares de castigo o de espera sino más bien ir al lugar de los ‘iguales’ que se adelantaron. Ese lugar es concebido como bueno, donde nos están esperando, donde algún día nos encontraremos.
Tanto la gente mayor como los muertos eran muy respetados anteriormente. Se dice que la mitad de cualquier difunto se iba al cielo y la otra mitad al infierno. Si era un hombre malo malo, pues se iba directo al infierno, pues en el cielo no es aceptado alguien con tanta maldad. Durante los meses de Octubre y Noviembre se da mucho el rezo por los muertos, pues éstos mandan mensajeros antes de la fiesta para hacerse presentes: entonces se aparecen víboras, comadrejas, animales que chillan en la noche.... todo esto es símbolo de que los muertos andan entre nosotros y nos pueden traer enfermedades, es por eso que hay que rezar. También pueden ser señas que den la pista de que murieron dejando algo pendiente (su maíz, tierra, animales) o promesas sin cumplir (un rezo, una misa, una ida al cerro). entonces el mensaje llega por medio de apariciones de cosas raras o animales y los hijos o nietos del difunto deben cumplir los pendientes. Las víboras por ejemplo no se aparecen tan fácil en el pueblo, entonces decimos que cuando se aparecen es que traen mensaje, son animales mensajeros (jadiuxpëë), que dicen algo del pasado, algo pendiente que no se cumplió.
La gente acostumbra rezar por todos los muertos, se hayan ido al cielo o no. Se sabe que si fue malo, su alma o espíritu se quema.
Las criaturas por ejemplo se van rápido al cielo porque no hicieron maldad, su espíritu se va rápido y el cuerpo queda en la tierra y se vuelve plantita. Las personas buenas se van al cielo, su espíritu va por un camino, ahí hay un juez, dicen que cuando la gente se desmaya, a veces tienen esa experiencia de ver un camino lleno de flores que es increíble, con mucha paz y tranquilidad, pero que al final hay un señor que les ha dicho que todavía no es tiempo, que no llega su hora y por eso no mueren, pero los que ya está bien muertitos pasan rápido por ese juez.
El infierno es un lugar de llamas, lumbre que está prendida todo el tiempo y que todo el tiempo está en el cuerpo. Dicen que hay víboras, comadrejas y búhos. Dicen que los búhos no son animales buenos, pues cuando chillan en la noche es que va a pasar una desgracia.

3 comentarios:

popoluca dijo...

Se me hace un comentario muy apresurado. Se presume de la lengua ayuujk como muy versátil, compleja y completa ¿Cómo que no existe la palabra "castigo"?.
castigo o pena son sinónimos que cualquier lengua -que presuma de elegante, culta o compleja- deben tener en su vocabulario!!! Lo contrario hace epensar que el autor de esta nota no tienen un dominio de la lengua lo suficientemente completa para hacer afirmaciones tan categóricas.
Habría un vacio, en todo caso, de los conceptos jurídicos o teológicos de "pena menor", "pena capital", "castigo autoinflingido, etc. o simplemente, de "castigo" a secas. En todo caso consúltense las fuentes lingüísticas de zoque y popoluca (lenguas emparentadas con el mixe), donde hay raíces lingüísticas que hacen referencia a "castigo".
Por otro lado, la visión que tiene de la muerte se asemeja más a la concepción judeo-cristiana, que poco o nada tiene que ver con la cosmovisón indígena del Inframundo.

popoluca dijo...

Es un buen intento de comentario -aunque muy riesgosas afirmaciones -. Una lengua, cualquiera que esta sea, no necesariamente debe tener un concepto categórico, en este caso, me refiero al término "castigo". Aparece, sí, construída en el contexto del habla. Por ejemplo, en las lenguas zoqueanas se utiliza la raíz "ko", como posesivo del sujeto, y "peky" referido a la pena, en términos jurídicos. Por tanto se entiende en el contexto del habla como "[paga]su culpa, su pecado, su pena", es decir, se impone una pena que se juzga a una falta.
En otras palabras, "castigo" podría entenderse literalmente como "paga su falta, su delito" o "se impone una pena por su falta". Para que exista un término que califica una acción, debe existir su contrario, en este caso, felicitación.
Con un saludo afectuoso.

colectivo mixe dijo...

Gracias por ambos comentarios.
Explicaré un poco el contexto de ese escrito. Se trata de una transcripción basada en una plática en castellano con el maestro Palemón Vargas (quien domina la lengua ayuujk). En cuanto al término castigo, si vemos, el enunciado se refiere a la idea de "castigo" en cuanto concepto y en relación al contexto de la muerte, por tanto no es que no exista un vocablo como tal, sino la idea de él. Como bien se menciona en el 2do. comentario, existen construcciones en el contexto del habla y en ayuujk para referirse al castigo se emplearía la construcción:
wanyë na yë te´en tjääkiapy
"que pague lo que ha hecho".